Hoy tenemos un día duro por delante pero también muy bonito ya que hoy hacemos la etapa reina del Camino Primitivo y sin duda unas de las que más belleza paisajista permite disfrutar, Es la variante de Hospitales, más de 15 kilómetros inhóspitos, solitarios y de gran dureza ya que va atravesando literalmente toda la montaña donde hay que librar fuertes desniveles en un principio de subida y luego de bajada.
A lo largo de la ruta lo único que nos encontraremos serán grandes manadas de caballos salvajes y los famosos hospitales, los que dan nombre a la ruta, estos son refugios de montaña donde antiguamente los peregrinos que pasaban por estas tierras podían albergarse en ellos. Durante la ruta nos encontraremos 3 y todos están en ruinas pero sin nos coge el mal tiempo nos servirán para refugiarnos.
La ruta sigue hasta que coronamos el puerto del Palo, a partir de aquí nos espera una fuerte bajada que nuestras piernas resentirán por el largo camino que traemos atrás, seguimos descendiendo todo el puerto hasta que pasamos por una pequeña aldea llamada Montefurado en la que apenas viven más de 10 personas, aquí hacemos un pequeño descanso para recuperar fuerzas y afronta el último tramo que nos queda hasta BERDUCEDO.
Una de las dificultades de esta ruta es que durante la variante de hospitales no encontramos ningún sitio donde poder reponer agua o comer algo con lo que hay que aprovisionares de agua sobre todo también hay que ir muy pendiente de las pocas señales que nos encontraremos ya que no esta muy señalizada, pero si no perdemos el sendero no hay ningún problema, tambien ha que tener cuidado con la niebla y no perderse del grupo para no quedarse desorientado.
Tras abandonar Montefurado ya dejamos atrás la ruta de hospitales y continuamos por el camino normal, el cual se nos hace interminable aunque sólo nos queden unos 5/6 kilómetros hasta el albergue.
Como esta ruta tiene poco tránsito nos encontramos con el inconveniente de que el albergue solo dispone de 10 plazas. Sólo quedaban libres 3 plazas pero necesitamos otras 2 para qué el grupo no se divida, tras darle un poco de pena a la hospitalera, al fin accede a dejarnos dormir en el suelo con esterillas.
Pasamos la tarde hablando y haciendo las labores del peregrino( lavar la ropa sucia, estiramientos, curas, estudio de la etapa para el día siguiente...)
Sobre las 21:00 preparamos la cena que como viene siendo costumbre ya, me toca a mi hacerlo pero siempre con la colaboración de todos, tras cenar y un poco de sobremesa decidimos dormir rápido ya que el cuerpo lo pide tras el día que le hemos dado.
vamos que esto no pare muchachos!!
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